8/1/08

Suerte ¿mala o buena?


Por fin tengo ganas de escribir algo.
Como muchos de vosotros sabéis el pasado día 15 de diciembre sufrí un accidente con mi niña.
Yo no me acuerdo de nada de lo que ocurrió, pero según todos los indicios, parece que pillé una placa de hielo y la moto hizo zipppp. Con el consiguiente golpe y arrastrón.
Afortunadamente, las consecuencias no han sido graves para ambos.
La Lola: se ha roto el soporte de matrícula, el soporte del piloto trasero, el propio piloto trasero, las asas del pasajero, los dos plásticos laterales. gracias al tope anticaidas, que ha hecho su trabajo, se ha salvado el lateral izquierdo. Y salvo alguna cosilla más (palanca de cambios, silencioso y semimanillar) que son reparables , está sorprendentemente bien. Ahora toca ir ahorrando y poniéndola a punto. Gracias que no ha tocado chasis ni ningún punto delicado.
El menda: rotura de la costillas 10ª y 11ª derechas, luxación del hombro izquierdo, esguince cervical, y un morao enorme en el muslo y el costado derecho. Llevo desde ese día de baja, y espero que esta semana o la próxima me den o pida el alta. Parece que todo evoluciona bastante bien.
Y ahora al tema.

Esto hace reflexionar mucho, os lo aseguro.
Estoy algo jodido porque no sé que pasó en realidad. La carretera era de mis habituales, incluso en invierno, la zona no presentaba ninguna dificultad y había pasado por ahí incluso con temperaturas más bajas, pero tuve mala suerte y ese día hubo hielo. (No fui el único que cayó ese día allí).
Después tuve buena suerte (o más bien me la busqué). Salgo siempre equipado a tope (mono, espaldera, botas, casco, guantes) y eso me salvo de que las consecuencias fueran mayores. También buena suerte porque no choqué con ningún guardarrail.
Al final, lo más jodido, las 48 horas de hospital para ver como evolucionaba del golpe en el tarro (y parece que sigo igual de mal que antes ;-) ) y ver a la familia y amigos muy preocupados por todo.
Aquí me gustaria agradeceros a todos vuestro apoyo y ayuda, desde las llamadas, las visitas, los que hicieron de grua o de taxi, etc, etc.. En esta situación, se aprecia mucho más este tipo de cosas, y te das cuenta de que estas rodeado de un grupo de gente que son la leche(ya sabía que todos sois cojonudos, pero en esta situación estando tan sensible,y algo jodido, pues viene muy bien para recuperarse antes).

Después de esto piensas mucho en si seguir con la moto, pero mucho.
Como os he dicho a algunos, todavía no voy a tomar una decisión en firme.
Lo primero es recuperarme yo y después arreglar a la Lola, y entonces decidiré.
La opción dejar las dos ruedas está desestimada.
Las alternativas serían:
- Pasarme al enduro.
- Dejar la Lola para circuito.
- Seguir como hasta ahora.

La primera alternativa, la primera semana después del accidente, tenía un 95% de ser la elegida. Pero a día de hoy es del 70%. Y claro, el porcentaje va aumentado a favor de las otras dos, sobre todo la tercera.
Pero lo dicho, tomaré una decisión cuando sea el momento.
Por ahora, lo dicho, a arreglarnos los dos.

Insisto, un abrazo muy gordo a todos esos AMIGOS y FAMILIA por estar ahí.

6 comentarios:

Anónimo dijo...

Espero que te recuperes del tó, es decir, que tengas las mismas ganas de siempre de montar. Que arregles a tu Lola y en primavera te entre mono de hacerte una curvitas como de costumbre. Que llegue el veranito y te marques una buena excursión con el Abuelito y con los demás colegas, que tienes muchos y cojonudos todos. Ya sabes que a mí, en comandita no me va mucho montar, quizas porque no sé o no me siento cómodo teniendo alguien delante o detrás a mi misma velocidad, lo sé, lo sé, soy muy limitado. Pero eso no quita para que nos demos unas vueltecitas juntos. Está pendiente ir a Barco a tomarnos un buen entrecot al roquefort (El abuelito seguro que se apunta).
Ya sé que no debe ser fácil después de haberte dado tal castaña, pero las ilusiones son las que nos mantienen vivos y tu ilusión siempre ha sido montar. Yo también disfruto un montón y me siento muy seguro montando, aunque siempre tienes la sensación del peligro. Espero que recuperes, si es que se ha visto tocada, la seguridad en tí mismo y en tu máquina. Con buen asfalto, buenas gomas y buena cabeza, las motos no se caen, en todo caso las tiran los que van en lata.

Bueno, ya sabes, paciencia, mucha paciencia y a ponerse güeno

Bechitos

Ignacio

Anónimo dijo...

Lo cierto es que, cuando una tarde de siesta y sillón suena el telefono y ves cambiar la cara de la persona que habla e intuyes que lo que le estan contando no es nada bueno, te entra un escalofrio por el cuerpo.... pero bueno todo queda en un susto. Sustos de los que cuesta olvidarse, eso sí, pero de los que nos acordaremos entre risas seguro. (Te estoy viendo sacar de entre las sabanas, algo similar a una botellita de cristal con una "agüita amarilla"... en fin).

Siempre he admirado lo buenos pilotos que sois y lo bien equipados que vais para montar, y eso tiene contrapartida.
SUERTE, buena o mala??? creo que buena, acompañada de BUENA cabeza.

Yo si que espero volver a compartir contigo alguna de las inolvidables excursiones que tenemos a nuestras espaldas, entre otras cosas porque hacerlas sin tí no sería lo mismo.

Un BEsote AMIGO. Olguix

Esteban Palazuelos dijo...

tron, solo te digo que en un par de años como muuuucho tenemos que cruzarnos los States de costa a costa y yo paso de hacerlo en coche.

dragonfly dijo...

ánimo!
espero que ya estes un poco más recuperado

un saludo!

yoniboi dijo...

La vida se inunda de decisiones. Algunas tontas y fáciles, es decir, que no tienen mérito. Otras hay que hacer cuentas y no existe una solución óbvia. La decisión referente a seguir montando en carretera o dejarlo es complicada, pero en mi opinión la tomaste cuando compraste la GS después de tantos años de abstinencia. No eres el único en reconocer lo que tienes dentro de serie... unas muchas ganas de vivir la vida más que apostar por una posibilidad mayor de alargarla, algo que no sale en absoluto cierto de todos modos. No eres un descerebrado con ganas de impresionar a las pibas. No eres un pijo aburrido con otro jugete y ni puta idea de como llevarla. Eres motero, y sin moto, no dejas de serlo, sino te conviertes en motero frustrado. Y luego ¿Que? ¿Dejas de comer carne roja por el tema corazón? ¿Dejas de beber por el tema hígado? ¿Dejas de montar en bici por el tema de las articulaciones? Por ese camino te conviertes en una persona gris. A caso podrías abstenerte los cuatro meses de invierno profundo y dedicar el tiempo a otros hobis, ya que te faltan, pero no dejes de montar en carretera; Hombre; para eso inventó Dios el verano en la peninsula Iberica y los monos ventilados.
John

PISKUETO dijo...

Evidentemente me he perdido todo esto, por una desconexión clara.

Solo deseo que estes bien, que te recuperes totalmente y que vuelvas a coger la moto,que es tu pasión.

Siento de veras no haber podido ayudar.si necesitas cualquier cosa te ofrezco mi ayuda y todo lo que quieras,de corazón...

un abrazo muy fuerte...