La cabra tira al monte

6 de Diciembre, fiesta, se presenta frío pero despejado.
El día antes había medio quedado con Emilio para ir a ver su nueva adquisición y confirmamos por la mañanita.
Cojo el casco integral de la bici, los guantes, las gafas de ventisca del snow y algo de ropa por si acaso.
Y caminito a Pozuelo, al circuitillo de las antenas que se ve desde la M-40. Y siguiendo las indicaciones de Emilio, llego a la primera.
Allí están empezando a descargar el y Ángel, con la KTM SX 250 y la Honda CR 250.
No se han vestido todavía. Emilio me dice que si quiero cogerla mientras se pone la ropa. Creo que no le dejo terminar la frase y ya estoy sacando el casco del maletero.
Vueltecita por los alrededores, y a flipar. ¡¡Cómo tira el bicho!! Al principio tanteando un poco todo.
A cualquier insinuación del gas se cruza, je,je,je. Sonrisa de oreja a oreja. Pero también tienes la sensación que hay que currárselo para tener este juguetito por la mano(muchos km y entrenamiento hacen falta)


Vuelvo donde las furgos y todavía no se ha vestido.
Ángel sí, y me voy con él a hacer unos caminos.
¡¡Cómo echaba de menos esto de ir por caminos!! A pedo de burra, pero disfrutando cada metro, con caladita incluida.
Ya cogen estos dos las motos y se dan un paseo largo y algunas vueltas al circuito.
Un circuito de arena con unos cuantos peraltes, unos pocos dubies y mucha caña si quieres ir deprisa.


Por allí aparace el Oscar Gallardo con una YZF 450 de cross, impartiendo lecciones de como se puede ir de rápido. ¡¡Flipante!!
Aprovecho para llamar al Osquitar y antes de colgarle ya estaba cerrando la puerta de casa para venirse también.
Llega Oscar, saludos y cháchara, alguna fotillo y se da un paseito. También le mola,pero un poco conservador por la potencia bruta.


Yo ya estoy más suelto y cojo otro ratito la KTM y después nos vamos Oscar y yo con las dos motos, yo con la CR. Me gusta más de tacto la Honda, aunque tienen un bache en la entrega de potencia, que con una puesta a punto se soluciona. Aunque la KTM es claramente superior en prestaciones tanto de motor como de parte ciclo. Los más de 10 años entre ambas monturas se notan.
Otro ratiro de fotos y a eso de las 16:30h nos vamos a comer a una tasca cercana.
Esto ha sido la gotita que faltaba para empezar a darle vueltas y ver la manera de pillar un hierro de campo, para quitarme el mono de barro y arena, que tanto echaba de menos.
Soy un puto enfermo de las motos, me lo paso teta con cualquiera.





Gracias Emilio y Ángel.