
Pues nada,ya que iba a estar por Méntrida por obligaciones familiares, y aprovechando las buenas previsiones que había de tiempo, después de un invierno cañerito, lancé convocatoria de salidita dominguera.
Al final con poco éxito, por motivos varios, pero con la compañía de Edu y su GSR nos dimos una vueltecita para desempolvar a nuestras niñas.
Al final la salidita quedó más o menos así:
- A las 11h quedamos en Robledo.
- Salimos hacia Hoyo de Pinares.
- Cebreros, que estaba de carnaval y nos hizo modificar ligeramente el trayecto proyectado, teniendo que ir hacia el Tiemblo por la carretera de San Martín.
Muchas motos por todos sitios, y alguno que nos pasó un poco justito, pero como no iba el Abuelo, y estábamos en plan tranqui, pues eso, despacito y con buena letra.
Yo estrenaba cubierta delantera, y tampoco estábamos para hacer el macarra.
Tengo que ver otra vez en la próxima salida, porque me dio la sensación que vibraba un poco de delante cuando pasaba cierta "velocidad", pero no sé si es porque hacía un poco de viento o por un equlibrado no perfecto de la rueda.

- De Cebreros al Burguillo, y de ahí a coger la de Burgohondo. El primer tramo lo han tocado un poquito y los dos gañotes que había de 40 les han ampliado el radio y son ahora de 70, más cómodos y claro, más rápìdos.
En este tramo nos volvieron a pasar parte de un grupillo que ya nos pasó en la de Cebreros. Pero lo mismo, no había ganas de macarradas ( que cada vez tengo menos, sinceramente)
- En Burgohondo, paradita al solete, para comentar y de ahí, camino de vuelta.
- Hacia Navalmoral, el Barraco, Burguillo, San Martín.

- Aquí nos despedimos, Edu para casa, y yo hacia el Encinar. Paradita para ver si mi brother me acompaña a la comida familiar, pero al final iba más tarde, y a casita, con mojada de oreja a moto verde lima de 600 ó más que me encuentro en el último tramo de curvas hacia la urbanización.
No hice el macarra, lo que pasa es que iba parado el colega.
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